Cuando las parejas se casan tienen la idea de crear un patrimonio en conjunto, a este tipo de régimen patrimonial se le conoce como sociedad conyugal y a lo que anteriormente se le conocía como bienes mancomunados. Este régimen consiste en que la posesión de dicho patrimonio es de ambos cónyuges, puede ser universal o limitado, independientemente del origen de los bienes. Es universal cuando el patrimonio de ambos se unen en una totalidad o parcial cuando las partes determinan que la sociedad recae únicamente en los bienes adquiridos sobre el matrimonio.
Es importante mencionar que cuando existe una unión nupcial en lo que menos piensan las parejas es que puede llegar a existir una separación, pero según estadísticas del INEGI al año se divorcian 43 de cada 100 personas que contraen matrimonio, sin embargo, las parejas desconocen cómo estipularlo legalmente y sobre todo, las consecuencias jurídicas que implica el decidir optar por formar un patrimonio en conjunto. Por ejemplo: ¿Qué pasará con los bienes en caso de divorcio? ¿Qué sucederá si deciden separar sus bienes o incluso cuando uno de los esposos o ambos contraigan deudas?
La legislación familiar o civil contempla que si el divorcio se promueve a través de la vía administrativa, uno de los requisitos de procedencia es que los cónyuges hayan liquidado la sociedad conyugal conforme a lo estipulado en las capitulaciones matrimoniales o mediante el convenio de los cónyuges. Si se obtiene el divorcio y los esposos no han liquidado su sociedad conyugal, el divorcio no sufrirá efectos legales.
Si el divorcio se promueve mediante vía judicial, uno de los requisitos de procedencia establece que la solicitud de divorcio vaya acompañada de una propuesta de convenio que deberá contener lo relativo a la forma de administrar los bienes de la sociedad conyugal durante el procedimiento de divorcio hasta su liquidación, así como la forma de liquidar la sociedad conyugal, y en su caso, la exhibición de las capitulaciones matrimoniales. El inventario, avalúo y proyecto de partición se divide equitativamente con las partes, esto aplica en la mayoría de los casos en la Republica Mexicana.
Es importante que antes de contraer matrimonio se conozcan los regímenes matrimoniales, no porque alguno sea mejor que otro, pero es importante ser consciente y estar list@ para lo que pueda ocurrir en un futuro.
